EL SOLDADO DESCONOCIDO

Me contaba mi padre de pequeño, que en un paraje donde iba a labrar, en ocasiones salian del arado huesos humanos, sobre todo cuando se pegaba, a una linde. Esto lo concia bastante mas gente, pues al parecer en aquellos parajes se día alguna escaramuza durante las guerras carlistas y en aquel sitio murieron algunos soldados.
Pero hace algunos años unos historiadores, recorriendo el terreno, pues hallaron algunos de estos huesos y no se les ocurrió otra idea que dar parte al Juzgado comarcal, para que amparandose en la historia y en posibles restos arqueologicos, el Juzgado levantase los enterramientos, cosa que asi ocurrió.
En la excavaciones salieron multitud de huesos, espadas, cuchillos, y otros enseres de los soldados. Se determino que era la primera guerra carlista y estos soldados esra de ambos bamdos, carlistas y de la reina.
Hace unos dias, anduve por este paraje, una colina donde se libro la escaramuza posiblemnete a ver quien la tomaba y alli enterraron a los muertos. Una colina soleada ahora plantada de almendros que en pirmavera estan florecidos como homenaje a estos soldados. No pude evitar el coger unas flores silvestres y ponerlas en el tronco de un almendro como un pequeño homenaje a estos soldados desconocidos que no tuvieron quien les rezase y quedaron alli, lo que si tuvieron es el respeto de los lugareños que durante años respetaron esas tumbas como un santuario al honor, pues dieron su vida por un ideal, sea el que fuere.
Y ahora digo yo, que mierda les importaba a estos historiadores y al susum corda remover estos enterramientos, donde los restos de estos soldados moraban tranquilos, si al final los huesos que sacaron los llevaron al cementerio municipal para meterlos en u n osario comun, donde ya no tendran el privilegio de estar en lo alto de una colina y ver las flores en primavera. No saben dejar ni a los muertos en paz.

6 comentarios:

Verónica O.M. dijo...


¡Un poco mas y me paso de largo! como ya no ponías entradas pues.....
Tienes razón deberían haberlos dejado, allí tranquilos, aquel lugar siempre era mejor que el que ahora tienen.¡En fin! que a veces estarían mejor quietecitos.
Un abrazooo y a ver si te dedicas a estos menesteres, que el blog lo tienes bastante bandonado

Kurra dijo...


Totalmente de acuerdo con vosotras.

Mercedes Pinto dijo...


Pero cómo van a respetar a los muertos, mucho más cuando ni sus nietos pueden defenderlos, si ni siquiera respetan a los vivos. Tú pides mucho, amigo Curro. Sea como fuere, no te metas con los historiadores, ellos hacen su trabajo que no es ni más ni menos que recopilar datos históricos. ¿No esperarías que se pusieran frente a los huesos a rezar un Padrenuestro? Sí yo fuese historiadora, cosa que me hubiera encantado, desde luego habría escarbado hasta el último hueso. Y otra cosa, si de todas formas ahora todo el mundo quiere ser incinerado, ¿a qué tanta pena? ¡Ay! Si va a resultar que eres un nostálgico. Ya ves tú, las Guerras Carlistas, ¿no se perpetraron del 1833 al 1876? De eso hace ya mucho, pero no tanto como para no encontrar nada más que espadas y cuchillos, que no hablamos de la Edad Media, ya había armas bastante más sofisticadas. ¿Todavía se mataban a espadazos limpios?
Perdona Curro que no haya venido antes, creo que no se actualizó bien tu blog en el mío, no me había dado ni cuenta, pero te aseguro que a pesar de lo liada que estoy, no te lo puedes ni imaginar, te habría escrito enseguida. Así que no te enfades conmigo que no he tenido la culpa.
Un abrazo fuerte.

Kurra dijo...


Joder pues lleva razon mi hija, en aquellos años ya habia otras clases de armas no espadas y cuchillos.

Curro dijo...


Claro que llevo razon y escribire una entrada sobre los enterramientos. Amos a ver ¿que derecho tenian a exumar eso huesos? al fin y al cabo en la vida todo pasa y todo queda y ahi estaban sin molestar a nadie. Ahora que han conseguido, nada, siya sabiamos toda la historia que paso entonces por las gentes del lugar. Si me hubieran preguntado a mi no habrían tenido que averiguar nada. Respecto a las armas de entonces, todavía llevaban sable, pues eran de caballeria y los cuchillos eran las bayonetas de los fusiles, que entonces eran de avancarga. Era la primera guerra Carlista año 1834. Por cierto que rrasaban los pueblos por donde pasaban los Carlista. Uno de ellos el mio.

Mercedes Pinto dijo...


Llevaban sables, sí, pero sólo los tenientes. Ains. Pero espadas...