Y AL FINAL SAN MARTIN...........

Siguiendo con este espinso tema voy a contar dos anecdotas que no tienen desperdicio y que a veces a esta gente, le llega su San Martín.
La primera me la contó hace años un amigo militar. En los cuarteles, cuando la gente no está de guardia, normalmente se dedican a jugar a las cartas, la mayoria de las veces de dinero. Pues bien algunos individuos en una tarde de cartas llegaban a perder la paga del mes. Como entonces se cobraba el dinero en sobre, pues estos individuos, en este caso eran dos, no llevaban ningun dinero a casa. Las mujeres de estos tipos un dia fueron a ver al Capitan contandole que las estaban pasando canutas pues no tenian dinero. Entonces el Capitan optó por entregarles el dinero del mes de los maridos a ellas y así asunto resuelto. Pero entonces ante esta afrenta de no cobrar ellos, calentaron a sus mujeres. Estas fueron otra vez a quejarse al Capitan y este de momento no dijo nada, pero al poco tiempo en una formación, mando salir de ella a estos dos individuos y empezó a darles puñetazos tirandolos al suelo. Cuando estos reaccionaron, el Capitan les estaba apuntando con su pistola en la cabeza, jurando que los mataría si volvian a tocar otra vez a sus mujeres. Mano de santo, creo que se separaron, pero no vlvieron a tocarlas.
La segunda es que una mañana temprano ibamos a pescar un colega y yo. Eran las 6 de la mañana y cuando estabamos parados en un semaforo de un pueblo medio adormilados, de pronto se nos hecha un tipo sobre el parabrisas pidiendo socorro como en una pelicula de terror. Nos quedamos pasmados y antes de reaccionar el tipo volvió a salir corriendo. Al trancurrir varios segundos vimos venir a un tropel de mujeres corriendo, algunas con palos cruzando la calle. Una de ellas nos pregunto si habíamos visto pasar a un individuo corriendo, y al contestarle que si, salieron en su persecución. Entonces una mujer que también venía, ya entrada en años y que corría menos, le preguntamos que pasaba. Esta mujer se paró y nos contó que este individuo que era algo de encargado en la fabrica donde estaban, todos los dias se dedicaba a meterse con las chicas con tocamientos y proposiciones y se habían hartado y por eso iban en su persecución para darle una manta de palos y ponerlo en su sitio. Mi colega y yo en un principio pensamos en ayudarle o como minimo llamar a la policía, porque si lo encontraban seguro que lo linchaban, pero por otra parte se lo tenia merecido, asi que nos fuimos a pescar y que con su pan se lo comiera.
Un saludo

EL ABUSO DEL FUERTE

Esta mañana, estando esperando el turno el la peluquería del barrio, mientras unos leíamos el periodico, un fulano estaba hablando con otro de sus hazañas y sus tropelías. Es un fulano conocido en el barrio por su mala sangre que aconstumbra a meterse con todos, en especial con los mas débiles. Yo cada vez que me lo cruzo me revuelve el estomago el tipo este. La cuestión es que en un momento de la conversación el tío suelta la siguiente frase " A las mujeres hay que saber cuando hay que pegarles" o sea que el menda daba por sentado que hay que atizarles, solo que sabiendo cuando, y se quedaba tan ufano el machote, además de otras lindezas. Como esta mañana me he levantado con mal pié y encima tener que aguantar semejante engendro, me dispuese a meterme en camisas de once varas, insinuando los pocos cojones que tenía almeterse con una mujer que encima la conozco. Pero antes eso sí, calculando como podría salir del envite, no vaya a ser que saliera escaldado, sin embargo calculando que la primera ostia y patada en cierto sitio se la iba a dar yo, con lo cual ya no le iba a dejar levantarse, estaba ya dispuesto a retarlo en la calle como mandan los santos cánones y se hacía antes. Pues bien, cuando ya iba a lanzarle el guante, se me adelanta otro vecino que estaba a mi lado y que seguramente estaba pensando lo mismo que yo y le espeta a este fulano " He dicho que te vayas ahora mismo a la mierda, porque tu no puedes estar entre hombres, asi que coge la puerta y camina" Esto dicho por un tiarrón de dos metros y unos ojos que salían chispas, han sido razonoes fuficientes para que el cobarde éste haya agachado las orejas y sin poder sostener la mirada, haya cogido la puerta y se haya marchado, eso sí con la advertencia por parte del otro de que no volviese mas por la peluquería.
En el proximo post, contare también un par de anecdotas que tampoco tienen desperdicio y vereis que si todos colaboraramos en esta plaga, lo mismo la erradicabamos o al menos la disminuiriamos bastante. Un saludo a todos. Y a los Murcianos felices fiestas.